domingo, 22 de septiembre de 2013

El mármol.

Incluso el mármol más duro se puede resquebrajar aunque hará falta un golpe muy seco para que lo haga… Mientras tanto seguirá ajeno a su herida.
Las palabras son agradables pero... no llenan, a mí NO. Lo siento.
Demasiadas promesas rotas tengo ya, y no es lo único que está roto... hace tiempo que intento pegar los pedazos de alguna otra cosa...
No hay manera de recomponerlo y quizás sea hora de dejar de intentar pegarlo. 
Se acabó.
Lo mismo que aparecen... se van.
Lo mismo que abren... cierran.
Lo mismo que hablan... callan. 

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